No hay ninguna certeza de que el régimen político venezolano esté por cambiar. Sin embargo, los acontecimientos de las últimas semanas incrementarían la probabilidad de que haya una transición hacia un sistema económico en el cual el mercado tiene un papel importante, lo que anima a los comerciantes costarricenses.
Se trata de un país cuyos recursos petroleros están entre los más grandes del mundo, así como vastos tractos de tierra fértil, ubicado apenas a 1.000 kilómetros de Costa Rica.
Mientras tanto, el comercio bilateral se ha deteriorado en los últimos años, por los problemas internos de Venezuela.
Entre 2012 y 2018, las exportaciones desde Costa Rica cayeron en un 93%, pasando de $82 millones a $5 millones, según Cadexco.
Las importaciones también decrecieron en ese lapso, pasando de $40 millones a $14 millones.
“La subfacturación y corrupción frenan la posibilidad del sector privado de exportar a Venezuela, pero sin duda un régimen más pacífico permitiría resolver los problemas de hambre y ataduras comerciales que se viven hoy”, dijo Vladimir de la Cruz, politólogo y exembajador de Costa Rica en Caracas.
Las principales exportaciones costarricenses a Venezuela en 2018 eran medicamentos, hojas de aluminio y dispositivos médicos.
Los principales productos importados desde Venezuela eran aluminio, betunes y asfalto y carbono.
“No es bueno que se nos incendie el vecindario, lo ideal es que ocurra un cambio de régimen con una salida pacífica y democrática, tanto en Venezuela como en Nicaragua, porque de lo contrario Costa Rica quedaría como cucaracha en bisagra”, aseguró Francisco Barahona, politólogo.