CARACAS, Venezuela –
Esta nación latinoamericana ha reportado al menos 1.370 casos de coronavirus y 14 muertes, pero los críticos creen que las cifras reales son mucho más altas.
El deteriorado sistema de atención médica del país en dificultades, carente de personal, medicamentos, equipos y suministros, se considera particularmente vulnerable en un brote.
El gobierno autoritario de Nicolás Maduro, por su parte, ha impuesto uno de los bloqueos más estrictos de América Latina. Las escuelas se cerraron en marzo, cuando solo se habían notificado unos pocos casos. Algunos ahora están proporcionando aprendizaje a distancia.
No hay horario para que los niños regresen a la escuela.
Pero el aprendizaje a distancia tiene sus límites. Los datos del Observatorio Venezolano independiente de Servicios Públicos muestran que el 53% de los hogares no tienen acceso a Internet.
Para aquellos que lo hacen, una conexión confiable es a menudo un desafío. Venezuela ocupa el puesto 175 en el ranking Speedtest Global Index de velocidad de Internet, el último en América Latina, detrás de Cuba y Nicaragua.
El colapso económico de Venezuela ya había golpeado duro a las escuelas. Los cortes de energía generalizados, el acceso limitado al agua potable y la escasez de alimentos y medicinas han empujado a unos 5 millones de venezolanos a huir del estado socialista en los últimos años, dejando aulas medio vacías cortas de maestros y fondos.
Sistema abierto.