El presunto testaferro del presidente Nicolás Maduro fue apresado en Cabo Verde, África, mientras adelantaba una gestión para el régimen. Venezuela calificó la detención como arbitraria e ilegal.
En medio del hermetismo que rodea la reciente captura del empresario barranquillero Alex Naím Saab Morán; desde que amaneció este sábado en el continente americano se han venido filtrando detalles sobre su actividad en Asia y África, en relación con supuestos hechos de corrupción, lavado de dinero y testaferrato al servicio de Nicolás Maduro.
Medios de comunicación, autoridades en Venezuela y fuentes judiciales cercanas al caso han asegurado que Saab Morán estaría detrás de los envíos de gasolina desde Irán hacia Venezuela y que, precisamente ello habría permitido su captura en la noche de este viernes en Cabo Verde (África), a donde llegó en un avión privado que aterrizó, supuestamente, para abastecerse de gasolina.
Si bien en un principio se había dicho que Cabo Verde había sido una parada en la ruta que seguía desde Rusia hacia Irán, la periodista e investigadora venezolana especializada en Crimen Organiz ad oTra ns nacional, Maribot Petit, dijo en su portal web que Saab viajó de Teherán (capital de Irán) a Cabo Verde, siguiendo un plan de vuelo hacia Argelia (África).
“El acusado fue a Cabo Verde porque hay un barco, retenido en esa isla, cargado con gasolina que sería transportada a Venezuela. El armador se niega a salir con la carga porque teme a las sanciones impuestas por los Estados Unidos al régimen de Maduro”, indicó la periodista en un artículo pupodría blicado este sábado.
Petit afirmó que Saab se encontraba en Teherán gestionando los envíos del hidrocarburo y que, incluso, habría comprado “una lujosa propiedad” en Irán desde donde operaba “el manejo y negociación de los envíos de gasolina”.
Por otro lado, medios de comunicación venezolanos aseguraron que hace tres semanas funcionarios de inteligencia de Estados Unidos conocían la ruta del empresario, la cual habría partido desde Caracas hacia Irán y pretendía regresar con considerables sumas de dinero en efectivo.
Maribot Petit también publicó que, al momento de ser capturado, Saab viajaba en el avión G5000 matrícula T7JIS, registrada en San Marino, que sería administrado por la empresa Altair Jets Corp, de Panamá.
“De acuerdo a las bases de datos consultadas, este avión registra varios vuelos hacia Venezuela en 2019 (…) Es propiedad de Amado Faraco Heredia y David Faraco Heredia, este último, Teniente Aviación FAN (2003)”, detalló Petit.
EXTRADICIÓN. Hasta el cierre de esta edición se desconocía si Saab se encontraba en un centro de detención en Cabo Verde, o si había sido trasladado a otro país, dado que entre ese país africano y EEUU no existe un acuerdo de extradición.
Sin embargo, varios medios de comunicación aseguraban que el barranquillero podría llegar el lunes a Miami (EEUU), donde ingresar al Centro Federal de Detención ubicado en el centro de la capital del estado de Florida, en cumplimiento de su proceso de extradición. Lo que sí se conoció es que Interpol había emitido una circular roja contra Saab Morán por delitos relacionados con el lavado de dinero, con fecha del 13 de junio de 2020.
“CAPTURA ARBITRARIA”. A través de un comunicado, el Gobierno de Nicolás Maduro se pronunció sobre la captura calificándola de “arbitraria” y asegurando que el barranquillero tenía la nacionalidad venezolana.
“Este hecho violatorio del derecho y las normas internacionales, se corresponde a todas luces con las acciones de agresión y asedio contra el pueblo venezolano, emprendidas por Estados Unidos ”, dice el documento.
El mismo confirmó la detención el 12 de junio y apuntó que la orden de captura de Interpol contra Saab tenía fecha del 13 de junio.
También dice que el empresario colombiano se encontraba consiguiendo alimentos para los Comités Locales de Alimentación (Clap) e insumos médicos.
“QUE SE HAGA JUSTICIA”. El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, se refirió en la tarde de este sábado a la captura de Alex Saab asegurando que espera que “se haga justicia para los venezolanos” e indicó que el barranquillero es responsable de la apropiación ilegal de alrededor de 4.400 millones de dólares.
“La detención de Alex Saab demuestra que no hay intocables. Deben entender que la justicia llega, aunque a veces tarde”, dijo ayer Guaidó en una entrevista.
Agregó que la captura de Saab no es casualidad, sino que obedece a investigaciones del Parlamento venezolano que datan de 2016, toda vez que “esta persona tiene que ver con el hambre, la miseria y la injusticia alimentaria en Venezuela”.
“La presión internacional hoy está muy clara luego de la detención de un testaferro de la dictadura (…) Es claro el nexo con Nicolás Maduro, los contratos (…) Hemos trabajado con países aliados para llevarlo a la Justicia internacional”, apuntó Guaidó.
ACUSACIONES DE VIEJA DATA. Alex Naín Saab Morán trabajó por muchos años sin aparecer en el radar de las autoridades y la prensa, pero hace cuatro años el imperio que había construido empezó a ganar renombre, no solo por lo exitoso de sus negocios en el exterior, sino por los tintes de corrupción que mancharon su nombre en la palestra pública.
Los cuestionamientos a su nombre datan de agosto de 2017, cuando la exfiscal de Venezuela, Luisa Ortega, lo mencionó como socio corrupto de Maduro.
En su momento, la exfiscal aseguró que Saab era representante y copropietario con Maduro y otros dos colombianos, de una empresa registrada en México llamada Group Grand Limited, la cual se dedicaba a vender alimentos al Clap (Comités Locales de Abastecimiento y Producción), el programa gubernamental que comercializa productos regulados entre la población, que escasean en los supermercados venezolanos.
Un año más tarde, la Fiscalía de México confiscó un cargamento de víveres en cajas de mercados con la etiqueta del Clap, avaluado en 61 millones de dólares, popr lo que se volvió a vincular a Saab como copropietario de la empresa.
Con la incautación, el ex vice fiscal de México, Alonso Israel Lira, dijo: “De acuerdo con la investigación, un grupo de personas y empresas obtienen recursos públicos venezolanos, los desvían de sus fines humanitarios y a cambio adquieren alimentos con los que especulan aprovechándose del desabastecimiento y la carestía que aqueja a Venezuela”.
El funcionario explicó que se compraban alimentos de baja calidad, exportándolos con sobreprecio a Venezuela y revendiéndolos al Estado venezolano y a la población 112 veces más costosos de lo normal, a través de los Clap.
En julio de 2019, el Departamento del Tesoro de EEUU emitió un informe sobre el fraude en el que participó el barran qui lle ro en el plan alimentario del gobierno de Venezuela,junto con el también colombiano Álvaro Pulido.
Según la acusación formal, desde noviembre de 2011 y hasta al menos septiembre de 2015, Saab y Pulido se confabularon con otros colombianos en Miami para lavar el producto de un esquema de soborno ilegal, transfiriendo unos 350 millones de dólares fuera de Venezuela, hacia o a través de Estados Unidos, a cuentas en el extranjero que poseían o controlaban.
Resaltaron que Saab se aprovechó desde 2016 de contratos sobrevalorados vinculados al plan de ayuda alimentaria de los Clap.
Desde entonces, Alex Saab Morán es señalado de incurrir en los delitos de concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito, lavado de activos, exportación o importación ficticia y estafa.