La FIFA firmó ayer las primeras medidas contra Rusia en un momento en el que el mundo del fútbol reclama actuar con dureza contra el país presidido por Vladimir Putin por la invasión a Ucrania. El órgano rector del fútbol mundial reunió este domingo a su Mesa del Consejo, en la que participan el presidente de la FIFA y los seis presidentes de las confederaciones continentales, pare decidir por unanimidad un paquete con tres medidas.
En primer lugar se decidió que no se jugará ninguna competición internacional en el territorio de Rusia, y que los partidos en los que esta selección actúe como local se disputarán en territorio neutral y sin espectadores. Rusia tampoco podrá utilizar ese nombre en las competiciones, y deberá adoptar la denominación de «Unión de Fútbol de Rusia (RFU)». Por último, no se usará la bandera ni el himno en los partidos donde participen equipos de esta nueva Unión de Fútbol de Rusia.
En la nota hecha pública este domingo no se descarta tomar nuevas medidas, incluida una posible exclusión de las competiciones. Según la FIFA, esa opción «se aplicará en un futuro próximo si la situación no mejora rápidamente». Por último, el organismo que dirige Gianni Infantino se refiere también a la decisión de Polonia, República Checa y Suecia de no jugar contra Rusia en la repesca para el Mundial 2022. Asegura haber tomado buena nota y explica que ya ha entablado un diálogo con ellos para buscar una solución «apropiada y aceptable».
La FIFA reitera en el comunicado su condena al uso de la fuerza por parte de Rusia en su invasión de Ucrania y reclama que se restablezca de forma urgente la paz. También ha mostrado su apoyo a la federación ucraniana y asegura haber recibido solicitudes de ayuda por parte de miembros de su comunidad futbolística para abandonar el país cuanto antes.