El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguei Lavrov, afirmó ayer que los servicios secretos de Rusia y Venezuela mantienen contactos tras la fallida operación armada que buscaba desbancar del poder a Nicolás Maduro, y no descartó que Moscú asista a Caracas en la investigación.
“En lo que se refiere a la investigación de la invasión de Venezuela por mercenarios que tenían la tarea de perpetrar actos terroristas, sabotajes y derrocar al presidente legítimo, nuestros servicio secretos mantienen contactos”, dijo Lavrov. Agregó que “si en el marco de los acuerdos respectivos llega una petición de prestación de ayuda en estos asuntos, desde luego esta será estudiada”.
El jefe de la diplomacia rusa recalcó que todos los contactos de su país “con Venezuela, con su Gobierno legítimo, se llevan a cabo un marco jurídico, en base a acuerdos intergubernamentales, ratificado por los parlamentos venezolano y ruso, y tienen fuerza de ley. Subrayó que eso también se refiere a la cooperación militar entre ambos países y la prestación de servicio a los equipos militares que se suministran al país andino. “Son nuestras obligaciones contractuales”, enfatizó.
Rusia condenó la llamada operación Gedeón, que fue repelida por Maduro, que está acusado de narcotráfico en EEUU y por cuya captura las autoridades de ese país ofrecen 15 millones de dólares.