En el Condado de El Paso, el fentanilo se ha convertido en la droga que produce más muertes por sobredosis, de acuerdo con los datos más recientes de la Oficina del Médico Forense.
Los datos son devastadores, toda vez que las muertes atribuibles al fentanilo casi se triplicaron en un año: pasaron de 23 en el 2020 para ubicarse en 60 en 2021.
La estadística del Forense señala que en 2021, dos terceras partes de las 92 muertes a causa de drogas involucraron al fentanilo, un opioide sintético de bajo costo que frecuentemente se vende bajo el empaque de otras medicinas similares. A nivel nacional, cien mil estadounidenses murieron por
sobredosis de drogas en un solo año entre abril de 2020 y abril de 2021. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), las muertes por sobredosis aumentaron casi un 30 por ciento con respecto al mismo período del año anterior; la mayoría se atribuyen al fentanilo, cuya dosis en aún cantidades pequeñas es letal: sólo bastan dos miligramos.
El fentanilo es la principal causa de muerte entre los estadounidenses de 18 a 45 años, según los CDC, razón por la que el gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró una emergencia estatal y una guerra en contra de los cárteles mexicanos la semana pasada.
“El fentanilo vino a cambiar el orden del consumo de las drogas, al ser una sustancia barata y fuertemente letal”, señala el doctor Fernando González Maese, director en El Paso del Programa de Prevención de Sobredosis, una organización dependiente del Centro de Salud de la Universidad de San Antonio con presencia estatal.
Para el epidemiólogo, se trata de una droga de reciente aparición, más potente que el resto de los opioides –naturales y sintéticos– existentes en el mercado, por lo cual ha llamado la atención en cuanto a las altas tasa de mortandad.
“Es la causa de muerte por sobredosis más alta entre personas menores de 60 años y jóvenes”, señala el profesionista en entrevista con El Diario.
No obstante, señala que la verdadera problemática que existe tiene que ver con el abuso de sustancias en general, las cuales siguen presentes en nuestra sociedad con el riesgo de adicciones.
“Hemos visto el incremento de muertes directas por fentanilo, pero esto no quiere decir que otras drogas como las metanfetaminas, cocaína e incluso el alcohol hayan desaparecido”, dice el experto en epidemiología.
Señaló que por ejemplo en su organización les toca tratar casos de intoxicación severa de alcohol asociado con otras sustancias. Para ello han desarrollado un protocolo y establecido alianzas para tener una respuesta rápida a casos de sobredosis.
“Tenemos cinco trabajadores especializados en estos temas para atender llamadas de pacientes en estado de intoxicación aguda o personas que están viviendo cuadros adictivos. Para eso sirve este tipo de trabajadores”, dijo González.
Explicó que ofrecen una lista de servicios asociados, que van desde hospedaje, tratamiento hasta por 90 días con internamiento, ayuda para las personas que por alguna razón han perdido documentos o están fuera de sistemas de apoyo, como podrían ser veteranos o personas retiradas, a quienes ofrecen atención primaria de salud, así como psiquiátrica y consejería.
“El problema, la situación sería el abuso de sustancias en las que se encuentra el fentanilo”, dice González.
El médico asegura que si bien hay que establecer centros de vigilancia sobre adicciones en la familia directa, la indirecta e incluso entre compañeros de trabajo, existe todavía la posibilidad de enfrentar las sobredosis a través de programas de concientización.
“Que las personas se eduquen, que consulten a sus médicos conforme ven que alguno de sus allegados presenta síntomas y señales de adicción”, concluye.