El presidente de Francia, Emmanuel Macron, abogó ayer a favor de una Europa más unida y capaz de asegurar su propia defensa en un discurso sobre política exterior ante la comunidad diplomática en París.
En una alocución fuertemente proeuropea, Macron llamó a la creación de una defensa europea autónoma, liberada de la tutela estadounidense, una condición previa para que el Viejo Continente pueda desempeñar un papel en la reforma del orden mundial.
“La seguridad de Europa no puede depender solamente de Estados Unidos, somos nosotros los que debemos garantizar la seguridad europea”, declaró ante 250 embajadores, diputados y senadores franceses.
Añadió no obstante que para que haya “avances reales con Moscú” se necesitan “progresos sustanciales sobre la resolución de la crisis ucraniana y el respeto del marco de la OSCE” (Organización para la seguridad y la cooperación en Europa).
Sobre la crisis migratoria en Europa, Macron dijo que la única manera de controlar los flujos migratorios es impulsar una política europea coordinada.
Criticó además a Italia y Hungría, países a los que tachó de “oportunistas”, ya que dijo, se benefician de las ayudas de la UE, pero se niegan a cumplir con sus obligaciones en materia migratoria.