LIMA (EFE). Miles de ciudadanos venezolanos ingresan hoy a Perú por la región de Tumbes, fronteriza con Ecuador, en el último día dispuesto por el gobierno peruano para poder tramitar el Permiso Temporal de Permanencia (PTP), un documento con el que pueden residir, trabajar y estudiar de manera formal en el país.
El incremento del flujo de venezolanos por la frontera norte se elevó desde el domingo pasado, del promedio de 1.500 diarios, a unos 3.400 por el Centro Binacional de Atención en Frontera (Cebaf) en Tumbes, lo que generó lentitud en el control migratorio.
Por ello se dispuso el traslado de 30 inspectores de migraciones desde otras ciudades del país y se instaló ocho nuevos puestos de control con la finalidad de acelerar la atención a los inmigrantes.
“Muchos venezolanos piensan que se cierra la frontera, pero no se cierra”, explicó un representante del Cebaf Tumbes al canal N de televisión.
La confusión se debe a la disposición del Gobierno peruano de que solo los venezolanos que ingresaran hasta las 23:59 horas de ayer podrán solicitar el PTP hasta el 31 de diciembre próximo, lo que no implica un cierre de la frontera.
El presidente de Perú, Martín Vizcarra, indicó este martes que una vez vencido el plazo para pedir el PTP, su Gobierno evaluará si es posible reabrirlo nuevamente para que más venezolanos puedan solicitar la residencia en Perú.
El Gobierno peruano exige desde agosto pasado la presentación del pasaporte a los venezolanos, con excepción de los casos de carácter humanitario, como enfermos, ancianos, mujeres y familias que buscan reunirse, a quienes se les permite ingresar con cédula de identidad.
Perú, con unos 500.000 venezolanos, es el segundo país que más ciudadanos de ese país ha acogido en el último año y medio, solo por detrás de Colombia, que bordea el millón.
Alrededor de 2,3 millones de venezolanos han huido de su país como consecuencia de la crisis, según informes de la ONU.