Roban combustible y montan una gasolinería ‘Pérez’ que imita a Pemex

Un negocio de venta de gasolina ilegal montó un escenario para llamar la atención de posibles compradores. Usaron una lona en lugar de la estructura tradicional metálica de las gasolinerías de Petróleos Mexicanos (Pemex), pero los colores y el logo iguales a los de la paraestatal.

Gasolina Pérez, precisaba en grandes letras. Abajo, en lugar de las bombas surtidoras, había medio centenar de garrafas de todos los tamaños apiladas una sobre otra al borde de la carretera en la comunidad de Santa Ana Ahuetopan, según una fotografía que circula en redes sociales, pero que las autoridades no han confirmado ni rechazado.

El poblado de Santa Ana Ahuetopan se encuentra ubicado en el estado de Hidalgo (centro), muy cerca de la refinería de Tula, una zona de altos índices de perforación de ductos.

Según Pemex, en el primer semestre de 2018 en Hidalgo se detectaron 909 perforaciones en los ductos.

En 2017 se documentó 7,590 en todo el país, una cifra récord en el delito liderado por bandas del crimen organizado, algunas provenientes del narcotráfico, que genera perdidas millonarias para las arcas del gobierno el cual depende hasta en un 80% de este ingreso.

El gobierno mexicano declaró la guerra a la perforación de ductos para la extracción de combustible, una práctica que popularmente se conoce como “huachicoleo” y dice que utiliza tecnología de punta para la vigilancia de los ductos e instalaciones de almacenamiento e incrementó el número de elementos de seguridad.

En 2017 recuperó 15 millones de litros de hidrocarburos sustraídos ilegalmente y cerró alrededor de 70 estaciones que no acreditaron la procedencia de la gasolina.

Pero las diversas estrategias de los delincuentes no ayudan, entre ellas el bajo precio (puede llegar a costar hasta una cuarta parte del precio de las gasolinerías legales), la venta en comunidades lejanas o el traslado del negocio ilegal de un municipio a otro.

Rafael Zorrilla, presidente de la Unión de asociaciones de empresarios de la industria de hidrocarburos líquidos en Puebla, denunció que en el estado se vende gasolina robada en otros estados tras la intensa campaña en contra de “huachicoleros” poblanos.

“Llega combustible robado del estado de Hidalgo y también de Veracruz, lo que es la zona de Zacatlán, Huauchinango y Chignahuapan es combustible que roban en Veracruz y lo están llevando al estado de Puebla”, dijo.

Otro asunto es la corrupción. En la extracción ilegal de combustible han estado involucrados alcaldes, policías y funcionarios de tan alto rango como el secretario de Desarrollo Social (Sedesol), Luis Enrique Miranda, a quien la prensa local exhibió como hermano y cuñado de María del Carmen Miranda y Ricardo Mercado, propietarios d e una gasolinería clandestina.