Una cumbre de presidentes de siete países, mañana en Santiago, pretende fundar el Foro para el Progreso del Sur (Prosur), acto que significará el cierre de la Unión de Naciones Suramericana (Unasur). Bolivia no participa.
Siete países emitirán este viernes el certificado de nacimiento del Foro para el Progreso del Sur (Prosur) con una cumbre presidencial en Santiago de Chile, en un acto que significará el entierro de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur), aseguraron varios de los protagonistas.
Los mandatarios de Argentina, Mauricio Macri; de Brasil, Jair Bolsonaro; de Ecuador, Lenín Moreno; de Paraguay, Mario Abdo; de Perú, Martín Vizcarra; de Colombia, Iván Duque, y el anfitrión, Sebastián Pieñera, ya confirmaron su participación, mientras que el mandatario de Uruguay, Tabaré Vázquez, declinó su participación y señaló que su país asistirá en calidad de observador con el vicecanciller Ariel Bergamino.
En tanto, Bolivia no confirmó su participación, el Gobierno de Nicolás Maduro no fue invitado y el presidente “encargado” Juan Guiadó dijo que enviará una delegación y los países de Surinam y Guayana confirmaron su participación, pero no aclararon en calidad de qué ni si sus jefes de Estado estarán presentes.
Con este panorama, Unasur queda prácticamente con sólo cinco miembros activos: Bolivia, Venezuela, Surinam, Guayana y Uruguay. El resto de naciones decidieron suspender su participación en el bloque porque consideran que está ideologizado y sirve a intereses del chavismo.
El docente de relaciones internacionales Rolando Tellería recordó que Unasur nació en el auge de los Gobiernos de izquierda, liderados por el extinto Hugo Chávez. “Pues bien, como los objetivos eran ideo- lógicos, cuando los Gobiernos de los países más influyentes, como Brasil, Argentina, Chile, Colombia y Ecuador, ‘giran a la derecha’, el organismo ya no tiene razón de ser”, dijo.
Ayer, el presidente de Uruguay Tabaré Vásquez dijo que su país se bajaba del evento presidencial porque no se puede hablar de integración excluyendo a los que piensan diferente.
“América Latina tiene una enorme cantidad de procesos de integración regional: Mercosur, Celade, Aladi. Somos la región más integracionista del mundo, tenemos una enorme vocación de integración, pero es la más ineficiente. Superponemos un proceso a otro y a otro, ¿hasta cuándo?”, reflexionó.
En la misma línea se pro- nunciaron varios excancilleres y legisladores de Chile, molestos sobre todo por la presencia del ultraderechista brasileño, Jair Bolsonaro. Los exdiplomáticos Mariano Fernández, José Miguel Insulza, Juan Grabiel Valdés y Heraldo Muñoz dijeron, a través de la misiva, que Prosur era “una simple ocurrencia” y resaltaron algunos de los logros de Unasur.
El analista Rolando Tellería coincidió y dijo que, bajo el impulso y liderazgo “derechista” de Piñera, se pretende crear Prosur, pero “como quiera que también subyacen objetivos de orden ideológico, este nuevo organismo tendría el mismo final, cuando cambie el panorama político de la región. Ese es el ciclo de todos los organismos que se crean con objetivos ideológicos, superponiendo los fines esenciales de la integración”.
Siete mandatarios y una delegación de la Venezuela de Juan Guaidó se reúnen este viernes en Santiago para dar el certificado de nacimiento a Prosur