La tensión en las fronteras de Venezuela con Colombia y Brasil se mantiene, mientras el Gobierno de Nicolás Maduro asegura que obtuvo una victoria frente al intento frustrado de la oposición, al mando de Juan Guaidó de ingresar la ayuda humanitaria a territorio venezolano. Estados Unidos advirtió ayer que el mandatario tiene los días contados.
En la frontera con Colombia se calcula que hubo más de 200 heridos, mientras la oposición venezolana habla de 4 muertos y más de 20 heridos de bala en la localidad de Santa Elena de Uairén, en el estado Bolívar, limítrofe con Brasil.
“Hoy se consolida la victoria del día de ayer, mañana consolidaremos aún más esta victoria (…) no pasó ni un camioncito de ayuda humanitaria”, expresó el poderoso dirigente Diosdado Cabello, en un acto ante seguidores en San Antonio del Táchira, limítrofe con Colombia.
Desde una tarima, acompañado por generales leales a Maduro, Cabello, presidente de la oficialista Asamblea Constituyente, que rige al país con poder absoluto, aseguró que el Gobierno de Nicolás Maduro está firme. “No nos hemos rendido ni nos vamos a rendir”.
“Ayer se lo demostramos, no caímos en lo que ellos querían, no caímos, no les dimos los muertos que ellos querían, actuamos muy inteligentemente conteniendo y aflojando hasta llegar a la victoria”, manifestó.
San Antonio está conectado con la ciudad colombiana de Cúcuta -principal centro de acopio de la ayuda enviada por Estados Unidos- por el puente Simón Bolívar, escenario el sábado de disturbios y donde fueron quemados dos camiones con medicinas y alimentos.
Más temprano, el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, responsabilizó a la oposición liderada por Guaidó de la violencia. “Todo ocurrió en Colombia”, afirmó, al acusar a “guarimberos (manifestantes opositores) drogados” de hacer arder los furgones.
Poblaciones venezolanas fronterizas con Colombia y Brasil estaban bajo tensión ayer, con pequeños focos de choque entre manifestantes y las fuerzas de seguridad en Ureña -también fronterizo con Cúcuta- y San Antonio.
Los militares venezolanos bloquearon ayer el puente Simón Bolívar con un contenedor de camión. Pequeños grupos de jóvenes encapuchados se enfrentaban con piedras a un contingente policial y militar que desplazó una tanqueta al lugar, constató un equipo de la agencia francesa AFP.
En Ureña también hubo pequeños choques. Un cordón de militares mantenía bloqueada este domingo la entrada de un puente fronterizo entre Ureña y Cúcuta, constató otro equipo de la AFP.
En Santa Elena de Uairén, en la frontera con Brasil, también había tensión. Dos personas murieron y una treintena resultó herida el sábado en enfrentamientos entre uniformados y pobladores, mayormente indígenas.
Los cargamentos fueron so- licitados por Guaidó, jefe parlamentario reconocido como presidente interino de Venezuela por medio centenar de países, después de que la mayoría opositora legislativa declarara “usurpador” a Maduro, denunciando su reelección como fraudulenta.
Venezuela afronta la peor crisis de su historia reciente con escasez de medicinas y bienes básicos, y una inflación que ha forzado un éxodo de 2,7 millones desde 2015, según la ONU.
Pence en Bogotá
El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, advirtió ayer que “los días de (el presidente de Venezuela, Nicolás) Maduro están contados”, recordó que “todas las opciones están sobre la mesa” para restaurar la democracia en Venezuela y remarcó que su país “tomará medidas” tras el
“trágico” día del sábado.
“Todas las opciones están sobre la mesa. Vamos a hacer las cosas que son necesarias para asegurar (…) que la democracia se impone y que hay un futuro más brillante para el pueblo de Venezuela”, sostuvo Pompeo en una entrevista en la cadena Fox, al ser preguntado por la posibilidad de una intervención militar.
“Los días de Maduro están contados”, aseveró, tras tildar al mandatario venezolano de “tirano”.
Pompeo afirmó que el sábado fue un “día trágico” para Venezuela al comentar la tensión en el país y los enfrentamientos entre opositores y fuerzas gubernamentales en las fronteras con Colombia y Brasil, que causaron varios muertos y decenas de heridos.
“Vamos a tomar medidas. Hay más sanciones que se pueden aplicar, más asistencia humanitaria que creo que podemos ofrecer”, dijo el jefe de la diplomacia estadounidense, sin ofrecer más detalles, posteriormente en otra entrevista con la cadena CNN.
En este sentido, Pompeo recordó que el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, participará hoy en la reunión del Grupo de Lima que se celebrará en Bogotá y donde EEUU insistirá en el respaldo a Juan Guaidó como presidente legítimo de Venezuela. una década de chavismo. Cabe resaltar que los más de 120 policías y militares que desertaron son mínimos ante los 235.000 efectivos de las FFAA. Es decir, hemos presenciado un episodio del conflicto donde chavismo y oposición midieron sus fuerzas.
Todo podría cambiar mañana en la reunión del Grupo de Lima en Bogotá donde participará el vicepresidente estadounidense Mike Pence y el propio Guaidó, quien pedía considerar “todas las cartas” en el conflicto. Dependerá del grado de intervención que tenga la decisión que tomen para darle un giro tanto al conflicto como a la región. Considerando esto último por las repercusiones que puedan tener tales decisiones en las elecciones de Bolivia y Argentina en octubre. Una mala decisión intervencionista puede fortalecer las izquierdas en estos países o viceversa, una intervención exitosa puede completar el ciclo del retorno de las derechas en la región en octubre.
Maduro está firme junto a las FFAA y todo puede cambiar con la decisión del Grupo de Lima”